La ergonomía en los puestos de trabajo es una disciplina que, aunque muchas veces pasa desapercibida, tiene un impacto directo en la salud, el bienestar y la productividad de los trabajadores. Se encarga de adaptar el entorno laboral a las capacidades y necesidades del ser humano, buscando prevenir lesiones, mejorar el confort y optimizar el rendimiento. En un mundo donde pasamos gran parte del tiempo sentados frente a un escritorio, la ergonomía ya no es un lujo, sino una necesidad.
Este artículo analiza en profundidad qué es la ergonomía, su importancia, cómo se aplica en distintos tipos de trabajo y cuáles son las mejores prácticas para implementarla correctamente.
¿Qué es la ergonomía?
La ergonomía es la ciencia que estudia la relación entre el ser humano y los elementos de un sistema, con el fin de optimizar el bienestar humano y el rendimiento global del sistema. Esta disciplina combina conocimientos de diversas áreas como la fisiología, la psicología, la ingeniería y el diseño industrial.
En el contexto laboral, la ergonomía busca adaptar el puesto de trabajo, las herramientas y las tareas a las características físicas y mentales del trabajador. Esto permite reducir el riesgo de trastornos musculoesqueléticos, fatiga, estrés, errores humanos y accidentes laborales.
Importancia de la ergonomía en el entorno laboral
1. Prevención de lesiones y enfermedades
Una mala postura, el uso de herramientas inapropiadas o la repetición constante de ciertos movimientos pueden derivar en lesiones como:
- Trastornos musculoesqueléticos (TME)
- Lesiones por esfuerzo repetitivo (LER)
- Síndrome del túnel carpiano
- Dolores de cuello, hombros y espalda
La ergonomía ayuda a identificar estos riesgos y a eliminarlos o mitigarlos, protegiendo así la salud de los trabajadores.
2. Aumento de la productividad
Un puesto de trabajo bien diseñado permite que el trabajador realice sus tareas de forma más rápida, eficiente y con menos errores. Al evitar molestias y distracciones causadas por incomodidades físicas, se promueve una mayor concentración y desempeño.
3. Mejora del clima laboral
Cuando una empresa invierte en la salud y bienestar de sus colaboradores, genera un ambiente de trabajo más positivo, reduce el ausentismo y fortalece el compromiso del personal.
4. Cumplimiento de normativas laborales
En muchos países, la implementación de principios ergonómicos en el lugar de trabajo está regulada por leyes y normativas. Cumplir con estas disposiciones evita sanciones legales y demuestra responsabilidad social empresarial.
Principales factores ergonómicos a considerar
1. Diseño del mobiliario
Un escritorio y una silla ergonómicos son fundamentales para prevenir lesiones. Algunos aspectos importantes incluyen:
- Altura ajustable de la silla.
- Soporte lumbar adecuado.
- Superficie del escritorio a la altura de los codos.
- Espacio suficiente para las piernas.
2. Posición del monitor y teclado
- El monitor debe estar al nivel de los ojos, a unos 50-70 cm de distancia.
- El teclado debe colocarse de modo que los codos estén en un ángulo de 90° y las muñecas rectas.
- El uso de un reposamuñecas puede ayudar a evitar la tensión en las manos.
3. Iluminación adecuada
Una mala iluminación puede provocar fatiga visual, dolores de cabeza y problemas de concentración. Es importante aprovechar la luz natural y utilizar lámparas de escritorio con luz blanca y regulable.
4. Ambiente térmico y acústico
Temperaturas extremas y ruidos constantes afectan negativamente la salud y la eficiencia del trabajador. La ergonomía también contempla el confort térmico y la reducción de contaminación acústica.
5. Organización del espacio
Los objetos de uso frecuente deben estar al alcance de la mano para evitar movimientos forzados. La disposición lógica de herramientas y documentos también contribuye a una mejor organización mental.
Ergonomía en diferentes tipos de trabajo
1. Trabajo de oficina
En entornos administrativos, la mayoría de lesiones se relacionan con posturas prolongadas, uso continuo del ordenador y falta de pausas activas. Para estos casos, se recomienda:
- Realizar pausas de 5 minutos cada hora.
- Estiramientos de cuello, espalda y piernas.
- Cambios de posición frecuente.
- Uso de sillas ergonómicas con soporte lumbar y ruedas.
2. Trabajo en fábricas o talleres
En ambientes industriales, los trabajadores suelen manipular cargas, utilizar herramientas pesadas o realizar movimientos repetitivos. Las recomendaciones incluyen:
- Implementación de equipos de asistencia para la manipulación de cargas.
- Entrenamiento sobre técnicas correctas de levantamiento.
- Rotación de tareas para evitar la fatiga muscular localizada.
3. Trabajo remoto o teletrabajo
Con el auge del trabajo desde casa, muchas personas trabajan en condiciones no ergonómicas. Es esencial:
- Establecer un espacio fijo y cómodo de trabajo.
- Utilizar sillas y mesas adecuadas (evitar trabajar desde la cama o el sofá).
- Mantener una buena iluminación.
- Seguir las mismas pautas ergonómicas que en la oficina.
Consejos prácticos para mejorar la ergonomía
- Ajusta tu silla correctamente: Tus pies deben estar apoyados en el suelo, y tus rodillas a la altura o ligeramente por debajo de las caderas.
- Coloca el monitor a la altura de los ojos: Esto evita la inclinación del cuello hacia adelante.
- Evita encorvarte: Mantén la espalda recta y los hombros relajados.
- Haz pausas activas: Levántate, camina o realiza ejercicios de estiramiento cada cierto tiempo.
- Adapta las herramientas a tu cuerpo: No te adaptes tú a ellas. Usa soportes, elevadores o reposapiés si es necesario.
- Evita cruzar las piernas: Esta postura puede afectar la circulación y provocar molestias en la cadera o la espalda.
- Coloca el ratón cerca del teclado: Para evitar forzar los hombros y el brazo.
Tecnología y ergonomía
En los últimos años, la tecnología ha desarrollado múltiples herramientas para apoyar la ergonomía laboral:
- Escritorios ajustables: Permiten cambiar entre trabajo sentado y de pie.
- Software de recordatorios de pausas: Aplicaciones que sugieren cuándo es hora de levantarse o hacer ejercicios.
- Teclados y ratones ergonómicos: Diseñados para reducir la tensión en muñecas y dedos.
- Gafas con filtro azul: Reducen el impacto de la luz de las pantallas en la vista.
Evaluación ergonómica del puesto de trabajo
Una evaluación ergonómica permite identificar los riesgos asociados al diseño del puesto de trabajo. Este análisis puede ser realizado por un especialista en seguridad y salud ocupacional, y debe incluir:
- Observación directa del trabajador y sus tareas.
- Medición de posturas, ángulos y movimientos.
- Encuestas o entrevistas para conocer molestias físicas.
- Recomendaciones específicas de mejora.
Rol del empleador y del trabajador
Responsabilidades del empleador:
- Proveer mobiliario y herramientas ergonómicas.
- Ofrecer formación en buenas prácticas posturales.
- Evaluar regularmente los puestos de trabajo.
- Fomentar una cultura preventiva.
Responsabilidades del trabajador:
- Aplicar los conocimientos ergonómicos adquiridos.
- Reportar molestias o dificultades físicas.
- Participar activamente en evaluaciones y capacitaciones.
- Hacer pausas activas y mantener una postura correcta.
La ergonomía en los puestos de trabajo no solo es una herramienta para mejorar la salud física, sino también una estrategia para potenciar el rendimiento laboral y crear ambientes de trabajo más humanos, seguros y productivos. Invertir en ergonomía es invertir en las personas.
Empresas que priorizan el bienestar ergonómico de sus trabajadores observan menores tasas de ausentismo, mayor motivación y una mejora significativa en la eficiencia operativa. Por ello, tanto empleadores como empleados deben asumir un rol activo en la promoción de prácticas ergonómicas, ya que el trabajo saludable no es solo una aspiración, sino un derecho.